viernes, 17 de octubre de 2008

capítulo cero: vomitado (un cc que debería de ser un paréntesis... íbamos tan bien con la racha cómica, pero volvemos a la comedia trágica)

"¿Por qué ha de ser mi alma como un trapo manchado que debe descartarse? Parece que no hubiera forma alguna de limpiarla.

Cada experiencia, cada acción que he realizado, parece dejar una marca en mí (... sí, lo sé, estoy parafraseando a 'El retrato de Dorian Gray' [y al catecismo que usaba cuando niño], nunca hubiera imaginado que fuera esta metáfora la que mejor explicara mi situación, ¿por qué serán mis 'prójimos' quienes, a fin de cuentas, parecen juzgarme con más dureza? ¿o seré yo? ¿o todos?), y esas cicatrices (cual 'marca de Caín', como lo planteara Hesse) me vuelven una especie de paria, de desecho, en cuanto a ciertas relaciones sociales (dicen que la basura de unos es el tesoro de otros...).

Atrás ha quedado la adolescencia fisiológica, porque el tiempo pasa, y no en vano, pero parece que este pesar del jovencito que fui no ha terminado con el final de mi primera juventud. Sigue doliendo; y ahora más todavía. A los pesares imaginarios se sumaron estos, completamente reales, de mis decisiones y omisiones de adulto inexperto.

Aún, no puedo renegar de mis decisiones, porque no quiero hacerlo, los resultados de mis acciones son una extensión de mí, hasta son parte de mí y yo parte de ellos.

De repente me siento usado, drenado y devuelto como mercancía dañada.

Me han mordido, masticado, saboreado, mal digerido...

Ahora sé cuál es el término que sigue: vomitado."

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Compadre... compadre... uno no sabe hasta donde ha de llegar su fuerza de voluntad, no se imagina lo que uno puede lograr más allá de las propias expectativas.
Un día me levanté con un ánimo como ese o talvez peor y me dije: "No, hoy puede ser tu día de suerte", no se me ponga así hombre. ¿Qué pasó? estuve pendiente. Bueno me escribe y me cuenta. Saludos, se le aprecia.

Luis dijo...

Mijo, arriba el animo. Como te decía ayer en la noche (groar) o en la madrugada, depende desde donde se le vea, la cosas hay que tomarlas de quien vienen.

Siempre te van a criticar lo querrás o no y es tu decisión si lo tomas. Todo tiene la importancia que vos mismo le des y como dice la frase: "Yo soy la suma de mis propios errores" y mas de alguien te los va a estar recordando (especialmente si sos fome, jaja)

Citando tu palabras:

"Me han mordido, masticado, saboreado, mal digerido..."

Me imagino que por lo menos una chupadita te llevaste. Si no todo es tan malo.