¿Qué puedo decirte, caballo, si quizás ni me entenderías?
No sólo por mi hablar enredado
Sino por lo incongruente de mis palabras.
Te tienen hecho un rocín,
Más "metafísico por no comer" que por mucho pensar;
Sos un caballo de carrousel de carne y hueso,
Más huesos que carne.
No creo que te parezca el trueque
Si te ofrezco la felicidad de los niños que te montan
A cambio de tu propia tristeza.
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